Una nueva meta

Pues resulta que llevo algún tiempo el considerando que necesito ver a un nutriólogo, no solo porque quiero bajar más de peso de lo que ya he logrado (que ya es bastante bueno), sino porque la verdad es que tengo una dieta muy desbalanceada, y es que desde muy pequeñita dejé de comer todo tipo de carne (roja, aves, pescados y mariscos) y si, ya se que muchos pensarán que es increíble y que "¡que horror!" pero a mi la carne no me atrae en lo más mínimo, de hecho me produce bastante asco además de que me hace daño. Sin embargo y aunque si como otros productos de origen animal como el huevo o el queso, tengo deficiencia de proteínas, cosa que con el ejercicio me ha provocado muchos problemas.

Así que pues me decidí a invertir algo de dinero y atender este problema de una vez por todas, si no lo había hecho es porque precisamente el dinero es siempre un problema, pero ya es muy necesario. Ya tenía los datos de un nutriólogo recomendado por dos partes completamente distintas y el viernes fui a verlo, como era de esperarse me puso una dieta muy estricta que además de que deporsí es restringida por aquello de las carnes, lo es más aún ya que no puedo comer casi casi nada más que verduras. Esta bien díficil la neta, y esta casi que de morir de hambre pero tengo que lograr seguirla si quiero tener una mejor salud y ver más resultados con el ejercicio. Pero ( y siempre hay un gran pero en todo) lo que no había considerado es que ponerse a dieta sale realmente caro!, hay que comprar alimentos especiales, que si el aceite en spray, el famoso "splenda", yoghurt 0% grasa o el cereal de la K, además todo se acaba de volada!...que hacerle, si a eso le sumo lo que cobra el nutriólogo, y el tratamiento médico que estoy tomando, con razón no he podido ahorrar nada de dinero U_U!

Bueno, pues el reto comenzó este fin de semana, vamos a ver si el estar ocupada durante el día me ayuda a no sentir hambre todo el tiempo y si en unos días más me acostumbro a las comidas tan ligeras, espero que si porque eso de sentir una sensación de hambre perpetua, es de la fregada.

Deseenme mucha suerte.